domingo, 22 de abril de 2007

Malleo...algo habrán hecho.


Las palabras de mi amigo Gustavo, que deslizó dos días antes, todavía resonaban en mi cabeza. “En el Malleo nunca pesqué bien” “En otro río pesco 20 truchas aunque sean de las chiquitas, en el Malleo no”. Eran un eco en mi cabeza, y por supuesto traté de hacerle entender que algo habría hecho mal. Como me iban a hablar mal de mi querido Rio.
En ese momento estábamos acampando en el Curruhé Grande y después de pescar tres días seguidos en Lagos, se extrañaba muchísimo las aguas rápidas de un Rio. En la pesca de la tarde ,(después de padecer esos vientos tan comunes en el Sur y que se hacen sentir más en los Lagos), y aprovechando que estábamos relativamente cerca le dije, ¿Che, Gustavo, y si mañana nos vamos para el Malleo ?, bueno vamos.......me dijo.
Fue así que madrugamos, café, y al Rio, desandamos el camino que nos trae de Junin con unas banquinas tapizadas de escarcha, atravesamos la Ciudad, el puente del Chuimeuin, los treinta kilometros hasta el Malleo, y a pescar. Por supuesto que mi tarea era hacer cambiar de opinión a mi amigo y arrancamos por los lugares que nunca me fallaron, y no me fallaron. Después de una miradita para ver como estaba el Rio, hice los primeros tiros, y las truchas no se hicieron esperar. Truchas Arco Iris, algunas de buen porte se rendían al final de mi tippet. Pero Gustavo no le encontraba la vuelta y eso me preocupaba, mi tarea pasó de pescador a guia, no podía dejar que se vaya de ahí con la misma opinión. Le sugerí hacer unos tiros en algunos lugares que para mi eran infalibles, y finalmente pudo ver los resultados , algunas Arco Iris, y una linda Marrón. Con la situación mas distendida, y por sugerencia de Gustavo, nos movimos a un lugar que él ya conocía; dejé que eligiera su lugar, y yo busqué el mio. En ese sector el Rio se divide en dos, formando una isla de unos 300 metros, y, a lo largo de toda la costa , una galería de Sauces que vuelcan sus ramas sobre el agua. El lugar, me dije. Abrí mi caja de secas, busque la mas grande y peluda, una Sofa Pillow en anzuelo N° 4,.un plumero. La ansiedad no me permitió ni cambiar el tippet un 4 X que ya tenía colocado. Me arrodillé a unos tres metros del agua, hice la primera pasada por debajo de los Sauces y nada, levanté, tiré de vuelta, y cuando la línea está perpendicular a mi, corregí la deriva, y un metro mas abajo,¡Pluffff¡, una tomada sutil, lo que me hizo pensar en esa centésima de segundo, esta no es chica, clavé, y ahí mismo sentí la dureza de un tronco, ¡uyy! me dije, milésima de segundo después, cuando se sintió pinchada, pegó un salto Doradezco y la ví. ¡Uhhhhh! que Marrón, ganó la corredera y me empezó a sacar línea, el corte era inminente, mire el terreno y la empecé a correr a la par, gritándole a mi amigo, que estaba a unos treinta metros, ¡vení a sacarme una foto!, ¡vení a sacarme una foto B........!, me bastaron unos cincuenta metros para poder acomodarla en un playón con poca corriente y después de una lucha de unos cinco minutos, con la ayuda de Gustavo pudimos meterla en el copo, foto, y al agua. Felicitaciones después de la maratónica captura, agradecimiento y comentario: Tenías razón Daniel algo mal estuve haciendo, no supe interpretar el río.
Daniel Iacovaccio.

1 comentario:

Anónimo dijo...

muy buena nota felicitaciones....Sebastian de nuñez